Vive tu vida

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Hay slogans publicitarios que, al manifestar las más radicales aspiraciones del hombre, nos resultan tan propios y nuestros, que insensiblemente los repetimos y gustosos intentamos realizarlos.

 

Este slogan "¡vive tu vida!" viene como anillo al dedo para el tiempo de vacaciones que se avecina y que la publicidad insistente atrapa las mentes de grandes y pequeños. Cada uno está ya planificando, con más o menos detalle, el lugar y el modo, donde y cómo, pasar las vacaciones. Donde y cómo "vivir su vida" este verano. Unos, en la playa; otros, en la montaña; quien, en familia; quien, en grupos de amigos o familias amigas. Todos bien organizados para poder "vivir su vida".

 

Nada de malo tiene ese: "¡vive tu vida!", si ese vivir tu vida significa cumplir los deberes personales, familiares y sociales, haciendo posible que los demás también puedan "vivir su vida" en la paz y bienestar.

 

A todos, a padres e hijos, a mayores y pequeños, a jóvenes y a niños, al programar las vacaciones, - cosas que no es posible a todos - viene bien recordar el pensamiento del poeta Gorch Fock: "No puedes alargar, no ensanchar tu vida, no puedes .. más que ahondarla". Sí.

 

Si, ahondarla y radicarla en profundidad de hombría y personalidad; Sí, ahondarla y radicarla en ideales nobles y valores incombustibles; Sí, ahondarla y radicarla en acciones de servicio generosos de superación; Sí ahondarla y radicarla en estudios y compromisos de superación; Sí, ahondarla y radicarla, como cristiano, en un mejor conocimiento de Cristo, como fundamento de vida y acción.

 

Si es así: tendremos que recomendar sin cortapisas y suscribir gustosos este slogan "¡viven tu vida!", siempre nuevo y actual.