Gracias Señor

Autor: Adolfo Robleto 

 

Gracias, Señor, por el momento hermoso
en que mi alma se lleno de gozo
que hizo nacer la esperanza en mi.

Gracias, Señor por tu voz tan quieta
que se hace oír cuando el dolor aprieta,
y es como ungüento de consuelo santo
Que neutraliza mi cruel quebranto.

Gracias, Señor, por tu amistad contínua
que me liberta de toda ruina,
Dándome fuerza para seguir 
Por el sendero del buen vivir.

Gracias, Señor, porque eres bueno,
porque cultivas en el terreno
de mi existencia las frescas rosas
De tus palabras dulces y hermosas.

Gracias, Señor, porque alumbraste un día 
con luz de aurora en mi tarde umbría 
Y ya no anduve por camino erróneo,
Pues fuiste tu mi compañero idóneo.

Gracias, Señor, porque aprendí el secreto
de un pensar sabio y concreto,
y ahora puedo confrontar la vida
Sin vacilar, con la frente erguida.

Gracias, Señor, porque tú existes,
para los pobres, para los tristes,
para el humilde de corazón
Que arrepentido busca el perdón.

En fin, Señor, gracias por todo
Lo que tú eres; y por el modo
tan compasivo que hay en ti;
Yo soy tu hijo, ven mora en mi.