Decisión, no sentimiento
Autor: Padre Gonzalo Gallo
Un esposo fue a visitar a un sabio consejero y le dijo que ya no quería
a su esposa y que pensaba separarse.
El sabio lo escucho, lo miro a los ojos y solamente le dijo una
palabra: ”ámela”. Luego se callo.
- Pero es que ya no siento nada por ella.
- “Ámela”, repuso el sabio.
Y ante el desconcierto del señor, después de un oportuno silencio,
agrego lo siguiente:
”Amar es una decisión, no un sentimiento; amar es dedicación y entrega.
Amar es un verbo y el fruto de esa accion es el amor. El amor es un
ejercicio de jardinería: arranque lo que hace daño, prepare el terreno,
siembre, sea paciente, riegue y cuide. Este preparado porque habrá
plagas, sequías o excesos de lluvia, mas no por eso abandone su jardín.
Ame a su pareja, es decir, acéptela, valórela, respétela, dele afecto y
ternura, admírela y compréndala. Eso es todo, ámela”.