Decálogo del periodista

Autor: Manuel Lozano Garrido

Obtenido en: Periodismo Católico

 

 

1. Da gracias al ángel que clavó en tu frente el lucero de la verdad y lo bruñe a todas horas.

2. Cada día alumbrarás tu mensaje con dolor, porque la verdad es un ascua que se arranca del cielo y quema las entrañas para iluminar, pero tú cuida de llevarla dulcemente hasta el corazón de tus hermanos.

3. Cuando escribas lo has de hacer: de rodillas para amar; sentado para juzgar; erguido y poderoso, para combatir y sembrar.

4. Abre pasmosamente tus ojos a lo que veas y deja que se te llene de sabia y frescura el cuenco de las manos, para que los otros puedan tocar ese milagro de la vida palpitante cuando te lean.

5. El buen peregrino de la palabra pagará con moneda de franqueza, la puerta que se le abre en la hospedería del corazón.

6. Trabaja el pan de la limpia información con la sal del estilo y la levadura de lo eterno y sírvela troceada por el interés, pero no le usurpes al hombre el gozo de saborear, juzgar y asimilar.

7. Árbol de Dios, pídele que te haga roble, duro e impenetrable al hacha de la adulación y el soborno, pero con tu frente en las ramas a la hora de la cosecha.

8. Si a tu silencio se llama fracaso porque la luz falta a la cita, acepta y calla. Pobre del ídolo que tiene los pies del barro de la mentira. Pero ojo a su vez, con la vanagloria del mártir cuando las palabras no suenan por cobardía.

9. Siégate la mano que va a mancillar, porque las salpicaduras en los cerebros, son como sus heridas, que nunca se curan.

10. Recuerda que no has nacido para prensa de colores. Ni confitería, ni platos fuertes: sirve mejor el buen bocado de la vida limpia y esperanzadora, como es.