Jesucristo

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Oficio digno y bizarro en el mundo es el barro; Dios el primer alfarero, el hombre... su primer cacharro.

Habitó alguna vez entre nosotros por corto tiempo un poeta, que hablaba del Amor por el Amor... paciencia y la paz... era de oficio terrenal carpintero, pero otra fue un gran ceramista pues con un puño de tierra y un soplo de aliento amoroso creó... su mayor poema.

Hablaba a las multitudes de un amor que nadie jamás comprendió, no escribió sus poemas y jamás editó libro alguno; más sus palabras y su voz perduran en cada corazón bueno. Y cada corazón distraido añora con ansia el escucharle...

Una tarde hace siglos con 5 panes y 5 peces prestados un milagro elaboró, sin embargo aquella muchedumbre igual que hoy... no entendió y soló comida devoró y sació su hambre de pan, aún adolece el hambre eterna de Amor.

Transcurridos van 2000 y pico de años y ese pastor que dejara todo por rescatar del risco su oveja perdida; sigue cada día besando tu frente al amancer... y al ocaso acude al pie de tu lecho a arroparte fiel y no le percibes...

Sin embargo... al hijo del hombre tu le crucificas a cada momento con tu desamor y no te das cuenta que estás destruyendo a pasos gigantes el bello poema que un día ya lejano con Amor creó...


El día tiene el color que el pintor de con su pincelada.