Las cosas que no se dicen...

Autor: Pbro. Dr. Francisco Fernández Carvajal 

 

 

Estuve releyendo viejos mensajes. 
Mensajes que escribí y nunca llegaron a su destino. 
Mensajes que se quedaron aguardando 
en la memoria olvidada del ordenador.
Renglones borrosos en sobres arrugados. 
Fechas estáticas que marcaron
lo que quise decir a alguien aquel día 
y al final me quedé para mí mismo. 
Y para el recuerdo. 
Fechas olvidadas.
Seguro que alguna vez tú has escrito también una carta, 
que no lanzaste a su destinatario. 
Mensajes importantes. 

Aunque la importancia de las cosas se difumina tras los años.
Quizá tú también los hayas conservado durante un tiempo.
He tenido una idea inspirada por la nostalgia, 
quizá una idea absurda:
Lo que escribimos aquella vez, fue para ser leído, 
aunque un último impulso evitara esa posibilidad.
Cementerio de mensajes. 
De aquellos que no fueron enviados,
o que si resultaron serlo pero no obtuvieron respuesta. 
Quizá mensajes sin destinatario aparente.
O puede que mensajes que dieron algún fruto 
que ahora se ha perdido... Mensajes. 
Tus mensajes. Los míos. Los de él. Los de ella...